Consumidores y marcas: una nueva era
Según un estudio de PwC, más de uno entre cada tres consumidores situó la confianza en la marca entre sus principales razones para influir en una decisión de compra, más allá del precio. Al mismo tiempo, en los últimos años hemos asistido a una tendencia a la baja de la confianza de la población general en los negocios y las empresas, a pesar de repuntes puntuales, a través de índices como el “Trust Barometer”. Las marcas son un puente que permite a las compañías relacionarse de una manera más fluida y enriquecedora, pero en esa relación juega un papel cada vez más importante la masiva quiebra de la confianza de los consumidores.
La era digital ha ofrecido a las marcas nuevas oportunidades de interacción con el consumidor, en las que la transparencia de los datos y el cambio de modelo de privacidad han generado enfoques diferentes y experiencias más personalizadas. Pero con la oportunidad también han llegado los abusos y, en ocasiones, el mal uso de esos datos y el bombardeo de información y contenidos ha erosionado la confianza de los consumidores en unas marcas que además no han sido siempre capaces de reaccionar a tiempo a los requerimientos de transparencia, integridad y credibilidad de unos compradores cada vez más informados, exigentes y en un plano relacional cada vez más equitativo.
“Las marcas que sean capaces de focalizar sus esfuerzos en aportar inspiración, añadan valor y mejoren la experiencia serán las más preparadas para liderar las preferencias del consumidor”
Este es el entorno complejo, incierto y fascinante que exploramos en el número 32 de la Revista UNO. Frente a una relación entre consumidores y marcas regida por el dato, en la que fenómenos como la inteligencia artificial o la realidad virtual van a jugar un papel determinante, grandes especialistas del marketing y la comunicación analizan cuáles serán los retos, pero también las oportunidades, de esta nueva era. En ella, las marcas jugarán más que nunca un rol clave para acercar a los consumidores a las compañías. Aquellas que sean capaces de focalizar sus esfuerzos en aportar inspiración, generen pertenencia añadiendo valor y utilicen los datos para la mejora de la experiencia, serán las más preparadas para liderar las preferencias del consumidor. Confío en que la visión de los expertos que han colaborado en este número te parezca tan interesante como a mí. De nuevo, un placer compartir contigo nuestras reflexiones sobre los desafíos que importan.