Veracruz 2014: Educación, Innovación y Cultura
La heterogeneidad es uno de los rasgos definitorios de los países de América Latina, no sólo en cuanto a su realidad política o económica, sino también, en su dimensión social.
Sin embargo, a pesar de esta diversidad del puzle latinoamericano, existe un elemento cultural común que ha favorecido históricamente la creación de sinergias y afinidades entre sus distintos países: el idioma.
Este elemento vertebral está en la raíz de la historia y la cultura compartida con España y, por extensión, la cercanía entre el español y el portugués vehiculan también los lazos especiales con Brasil y Portugal.
Paralelamente, la posesión de una misma lengua facilita el flujo de las relaciones comerciales y constituye, de este modo, un elemento acelerador del motor de la economía. Prueba de ello, es la formación de nuevos bloques como el de la Alianza del Pacífico que no sólo generan repercusiones en el devenir político y económico de los países latinoamericanos, sino que contribuyen al intercambio cultural y favorecen la movilidad académica y los flujos de personas en el ámbito de la investigación, posicionando, así, la región en el tablero estratégico internacional.
La cultura es y ha sido siempre un elemento integrador en la región y, por ello, debe convertirse en uno de los pilares fundamentales que estructure el proceso iberoamericano en el futuro
Por tanto, no sólo la lengua, sino más ampliamente la cultura, es y ha sido siempre un elemento integrador en la región y, por ello, debe convertirse en uno de los pilares fundamentales que estructure el proceso iberoamericano en el futuro.
El desarrollo de las clases medias surgido del incremento del poder adquisitivo y el mayor acceso a la educación, ha generado una revolución cultural en la región, a la que ha contribuido, por otra parte, la irrupción de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs). Sumado a esto, las redes sociales se han convertido en el elemento clave de las emergentes movilizaciones sociales de las que América Latina es testigo en la última década.
Por otro lado, la apuesta por la innovación favorece el crecimiento económico de los países latinoamericanos, su diferenciación y su liderazgo en el escenario internacional. Alineada con esta realidad, la próxima XXIV Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, con sede en la ciudad mexicana de Veracruz, se define bajo el lema: “Iberoamérica en el Siglo XXI: Educación, Innovación y Cultura”.
Este número de UNO es, por tanto, una reflexión sobre los principales aspectos de la cultura iberoamericana que serán abordados en la próxima Cumbre Iberoamericana en Veracruz (México). Y desde esa perspectiva, debate sobre la industria del libro y la edición, en general, el cine, las producciones de televisión, la gastronomía, el intercambio de estudiantes universitarios, el arte y las artes escénicas, y, además, la defensa conjunta de esa identidad vertebrada por el idioma en países como Estados Unidos, donde el elemento hispano-latino es emergente y con un progresivo poder social y político.