Una recuperación económica sinuosa: optimismo y amenazas externas
Todo el mundo tiene un plan hasta que recibe un golpe en la cabeza. Esta famosa frase de Mike Tyson parece resonar una y otra vez en estos tiempos de incertidumbre y amenazas externas. Primero, la COVID-19 tergiversó la economía mundial y puso de rodillas a las cadenas mundiales de valor, la política económica, los precios de los commodities, etc. Fue un shock de oferta y demanda que pocos lograron esquivar. La respuesta a nivel mundial vino de la mano de estímulos fiscales -para los países que pudieron hacerlo- una política monetaria expansiva y paquetes de ayuda, trayendo consigo consecuencias de largo plazo que aún están por descubrirse.
Luego del punto más alto de la emergencia sanitaria, algunas economías lograron crecer, sin llegar todavía a recuperar aún sus niveles prepandemia. Sin embargo, la incertidumbre regresó a finales de 2021 por el brote de nuevas variantes. Un breve vislumbre de recuperación se volvió a desacelerar a inicios de 2022, con los efectos económicos de la invasión rusa a Ucrania. La ansiada recuperación, aunque aún visible, no será sin un alto grado de resiliencia para los planes de cualquier nación, empresa o gobierno, y el escurridizo crecimiento tendrá que asentarse en pilares sólidos para no volverse a derrumbar.
Sin duda, no podemos esperar resultados distintos haciendo siempre lo mismo y mucho menos en entornos cambiantes como los actuales. En Ecuador, un país donde por mucho tiempo se enviaron las señales equivocadas al mundo, se ahuyentó la inversión, se amenazó con no pagar las deudas y de hecho se las incumplió, hoy se ofrece un panorama diferente encaminado a recuperar la credibilidad nacional e internacional, así como generar un marco que abra la puerta a transformaciones en materia económica y financiera.
El Banco Central del Ecuador espera que la inversión aumente 4,9 % en 2022 impulsado por una mayor inyección de capitales en los sectores petrolero y minero.
Desde una perspectiva económica y, dadas las limitaciones que tiene Ecuador respecto a su política monetaria—la moneda oficial es el dólar americano, por lo que no es posible imprimir dinero para dinamizar la economía—hay cuatro factores que están potenciando la recuperación económica de Ecuador en 2022: la evolución del crédito, el precio del petróleo, el acceso a financiamiento externo, y la atracción de inversiones.
El rol del crédito en la recuperación
La dinamización del crédito en 2021, que se aceleró cuando las actividades económicas pudieron reabrir, es una de las principales razones para el mejor desempeño económico alcanzado en 2021 y las expectativas de este año. En este contexto, más de 6,9 millones de nuevas operaciones de crédito fueron desembolsadas por la banca privada entre enero y diciembre de 2021, esto es, un 13% más que en 2020 (790 000 operaciones adicionales).
En este periodo, la banca colocó 25 551 millones de dólares en nuevos créditos, lo que representa un incremento de 9 % frente a 2020 (2 116 millones adicionales), de acuerdo con las cifras oficiales. Estas cifras evidencian el apoyo del sector bancario al país en el proceso de recuperación. Colocar nuevos créditos a los sectores productivos y a las familias ecuatorianas ha permitido mantener y ampliar negocios, generar más empleo, dinamizar la productividad y apalancar la recuperación económica. Además, siete de cada diez dólares de nuevos créditos entregados entre enero a diciembre de 2021 se destinaron a los sectores productivos (microcrédito, vivienda, empresas y PYMES).
En los dos primeros meses de 2022, los nuevos créditos crecen a un ritmo de 21 % anual y el crédito que mayor crecimiento presenta es el microcrédito con un incremento de 50 %. A dos años del inicio de la pandemia, la banca privada ecuatoriana se encuentra sólida y continúa acompañando la reactivación a través de la colocación de créditos, lo que ha contribuido a la recuperación de la producción, generación de empleo y reactivación del consumo en el país.
Ecuador cerró febrero 2022 con una inflación anual del 2,71 %, mientras que Perú lo hizo en una del 6,1 %, y Colombia en 8 %, la mayor del último lustro.
Precio del petróleo
Los precios de petróleo mantienen una expectativa al alza debido a los recientes acontecimientos en Ucrania, manteniendo el barril por encima de los 100 dólares. Para Ecuador esto tiene dos caras. Por un lado, significa mayores ingresos para el Presupuesto del Estado, pero, por otro lado, tiene un efecto con el encarecimiento de derivados de petróleo y otros productos. Ecuador cerró febrero 2022 con una inflación anual del 2,71 %, mientras que Perú lo hizo en una del 6,1 %, y Colombia en 8 %, la mayor del último lustro. Es vital mencionar que el país debe aprovechar la coyuntura del precio de petróleo, pero anticipar una transición energética progresiva hacia renovables.
Acceso a financiamiento
La posibilidad de volver a los mercados internacionales con emisión de bonos significa para el país la opción de tener fuentes adicionales de recursos para el financiamiento de obras y proyectos. La última vez que Ecuador emitió bonos soberanos fue en septiembre de 2019. La aprobación de cambios normativos en materia tributaria, inversión y empleo, así como cumplir con el acuerdo con el FMI y las acciones tomadas en materia de reformas plantean un escenario favorable para retornar a los mercados potencialmente en 2023.
Inversión
El Banco Central del Ecuador espera que la inversión aumente 4,9 % en 2022 impulsado por una mayor inyección de capitales en los sectores petrolero y minero. Para lograrlo se plantean varios mecanismos para fortalecer la inversión, que al segundo trimestre de 2021 alcanzó sólo el 1,1 % del PIB.
Se espera que la Asamblea apruebe el proyecto para atraer inversiones que pretende reformar la Ley de Alianzas Público-Privadas, mejorar el marco normativo para las zonas francas y dinamizar el mercado de valores. Otra estrategia para atraer inversiones es la reducción del Impuesto a la Salida de Divisas, pasando del 5 % al 4 %. Otra meta es alcanzar mayor apertura a la inversión privada en el sector petrolero. Se prevé delegar contratos de participación, donde la empresa privada invertiría a cambio de obtener un porcentaje de la producción petrolera.
El impacto se observa por el encarecimiento de importaciones de materias primas agrícolas principalmente de bonos y fertilizantes, ya que el 38 % de estos productos se importaron desde Rusia en 2021.
Finalmente, Ecuador busca concretar 10 tratados con mercados considerados estratégicos. El más cercano es un acuerdo con México para formar parte de la Alianza del Pacífico en 2022. Pese a estos cuatro elementos favorables, Ecuador tiene grandes retos que navegar en 2022. A nivel interno, es imperativo alcanzar los acuerdos necesarios para la gobernabilidad del país. En materia externa, el reto más latente es el impacto del conflicto bélico que deja secuelas para todos. En el caso ecuatoriano se traduce en menores exportaciones de banano, camarón, flores, pescado y café que en 2021 representaron 1 129 millones de dólares para la zona afectada (Rusia, Ucrania, Armenia, Kazajstán y Kirguistán). También el impacto se observa por el encarecimiento de importaciones de materias primas agrícolas principalmente de abonos y fertilizantes, ya que el 38 % de estos productos se importaron desde Rusia en 2021. Además, con la apreciación del dólar, el país tendrá menor competitividad en mercados internacionales.
La economía ecuatoriana, al igual que muchas otras, deberá estar preparada para sortear obstáculos en un camino sinuoso y, a pesar de contar con buenas perspectivas, buscar alternativas ante un entorno cambiante.
